Los búlgaros tienen la capacidad de «secuestrar» metales pesados que se encuentran en el suelo mediante un proceso llamado biorremediación, el cual los científicos optimizaron con un método fotónico.
Esta tierra que pisamos, mejor llamada suelo, tiende a considerarse como algo muerto, pero aunque no posea vida guarda en él todo lo necesario para generarla y al igual que el aire que respiramos se contamina a causa de diferentes actividades humanas.
La agricultura, minería, la producción industrial, entre otras actividades,introducen en el suelo diferentes tipos de contaminantes que afectan su composición original haciéndolo poco apto para trabajar. Afortunadamente casi todo tiene solución en esta vida y con ayuda de la naturaleza podemos encontrar las soluciones adecuadas.
Científicos de la Universidad Autónoma de Zacatecas hicieron uso de colonias de bacterias Lactobacillus bulgaricus (conocidas como búlgaros y famosos por utilizarse en la elaboración de queso y yogurt) para eliminar residuos tóxicos del suelo como metales pesados.
Esta investigación se realizó en alianza con el Centro de Investigación y desarrollo en Criotecnología de Alimentos en Buenos Aires. Utilizando el principio con el que estos lactobacilos impiden a otras bacterias su actividad patógena en el ser humano, se espera utilizarlos para capturar iones de metales pesados presentes en el suelo mediante un proceso llamado biorremediación.
La biorremediación es la descontaminación del suelo por medio de organismos vivos como hongos, plantas o enzimas. Este proceso se optimizó en el experimento con búlgaros por un método basado en el uso de luz infrarroja para estudiar la manera en la que estas bacterias interaccionan con iones metálicos.
Con estas pruebas se determinó la eficacia de los lactobacilos para atrapar estos metales y descontaminar el suelo. También se probó que es un sistema cero agresivo con el ambiente, natural y económico para eliminar la contaminación provocada por desechos industriales.
Uno de los resultados más curiosos de la investigación es que, entre más grande sea el radio de los iones del metal, la eficiencia del «secuestro» es mayor. Otro es que algunas colonias de lactobacilos son más efectivas para capturar ciertos metales que otras. A partir de estas conclusiones, se podrían cultivar colonias para hacer aún más eficiente la biorremediación.