Leche: Cabra
Tipo: Pasta blanda, corteza florecida recubierta de ceniza
Materia Grasa: No definido
Maduración: Entre 4 y 5 semanas
Aspereza: Suave
Vino: Mondavi Private Selection Chardonnay (D.O. Napa Valley)
País de origen: Estados Unidos
Región: California
Notas: En el corazón del valle de Napa, la famosa región vinícola, Bárbara y Rex Backus viven un sueño, que comenzó en 1972. La pequeña raza de cabra española manchega medra en el clima de California, y todos los quesos poseen una deliciosa sensación de flora y hierbas como sabor de fondo.
Bárbara fue quién ideó los nombres, todos ellos relacionados con su pasión por la cultura japonesa, y los aderezos que coronan los quesos sin duda reflejan el estilo nipón. La leche se somete a una pasteurización lenta con el fin de retener todos los sabores de la leche y, debido a que se utiliza un cuajo tradicional, todos los quesos poseen un sabor limpio con un sutil toque ácido.
Dado que la granja Goat» s Leap es un pequeño productor, sus quesos se pueden encontrar solo en las tiendas y mercados de la zona, además de en buenos restaurantes. Aparte de este queso, en la granja se producen otros varios quesos como el Goats Leap Sumi, un bonito queso en forma de pirámide truncada, con una corteza blanca florida y esponjosa recubierta de ceniza. También hacen el Hyku un queso similar al Crottin de tamaño grande, con una corteza de mohos blancos y decorada con flores, que posee una textura cremosa y acaramelada, otro de sus quesos es el Dafne, un delicioso queso rechoncho con la parte superior ligeramente aplanada y una corteza pálida, casi translúcida, aderezado con hojas de laurel, el Kiku es su quesos estacional estilo Banon, envuelto en hojas de parra frescas maceradas en vino sauvignon blanc. En la granja también producen el Carmela, un queso estilo Tomme con una corteza natural seca, y unos pequeños quesos muy frescos que se hacen por encargo.
El Eclipse es un queso de leche pasteurizada de cabra, en forma de tambor rechoncho (450 gr.) con una corteza florida recubierta de ceniza y coronada con anís estrellado. Con una textura maravillosamente delicada. Al cortarlo se puede ver una franja horizontal de ceniza que atraviesa la pasta, lo que explica su nombre, ya que Bárbara y Rex hicieron que se asemejara a un eclipse lunar.
El sabor está muy bien equilibrado entre la frescura láctica de la leche de cabra, las agradables notas cítricas con un toque de anís estrellado y un ligero toque terroso final, motivado por la ceniza. Su salinidad es correcta y su sabor perdura de forma prolongada en boca.
Es importante comer este queso a temperatura ambiente para degustar mejor su riqueza de sabores. Ideal derretido sobre pan tostado o para incorporar caliente sobre ensaladas y verduras, o solo acompañado de fruta fresca. Perfecto para combinarlo con vinos locales: blancos frescos y afrutados o tintos suaves de la región.