Leche: Cabra, oveja
Tipo: Pasta semi blanda, sin corteza
Materia Grasa: 45-60%
Maduración: Fresco
Aspereza: Suave
Vino: Filipa Pato Espumante (D.O. Beiras)
País de origen: Portugal
Región: Centro de Portugal / región costera
Notas: El requeijão (requesón en español) se produce a partir de suero de leche, el residuo de la producción del queso, en este caso del Rabaçal, al que se le añade un 10% de leche entera y la mezcla se calienta. El resultado es un queso un poco más firme y más oscuro que el queso fresco.
La Quesería Licinia Neves que es quien elabora este requesón, se encuentra en el Macizo de Sicó ubicado en la Serra do Rabaçal compuesto por un único conjunto de relieves y piedras calizas. Estas especiales condiciones geográficas de la vegetación en las laderas, donde aflora el romero, el brezo y la hierba de Santa María que alimenta a los animales cuya leche se ha seleccionado para preparar el queso Rabaçal. Esta combinación ofrece los sabores y aromas únicos que nos ofrece el Requeijão Serra da Sicó y lo hace un producto muy popular de la elección de muchos consumidores.
El Requeijão Serra da Sicó se elabora con una mezcla de leche de oveja y de cabra, sin pasteurizar, añadida en pequeña cantidad al suero obtenido de la elaboración del queso Rabaçal.
La mezcla se calienta y agita varias veces para producir una especie de requesón suave, de color blanco y de textura cremosa y granulada, que se forma en la superficie de la mezcla, tiene un aspecto ligeramente húmedo ya que es un producto fresco que no está sometido a ningún proceso de curado y por consiguiente no tiene corteza.
En realidad este queso es producto de aprovechamiento, está hecho para recuperar el suero de la producción de queso, pero se ha logrado un alimento con personalidad propia, en su país cuenta con muchos adeptos gracias a su versatilidad; a menudo se come como aperitivo a una comida con aceite de oliva y cilantro vertido sobre él, o como postre o merienda.
Para un mejor sabor se consume a temperatura ambiente. Pero se conservara en el frigorífico, donde tiene una validez de 7 días a partir de la fecha de producción.