Comer alimentos ricos en calcio es fundamental para prevenir la osteoporosis, el mal de los huesos.
El consumo de leche, yogur y queso descremados, son la mejor forma de proveerle al organismo ese esencial nutriente que el cuerpo no fabrica.
El 99% del calcio está en los huesos, por lo ese nutriente debería consumirse a diario.
Las personas nacen con 28 gramos de calcio, y en la edad adulta, llegan a tener entre 1.000 y 13.000 gramos.
Para lograr esto, es necesario consumir unos 800 miligramos de calcio por día. De lo contrario, el hueso se descalcifica.
Una dieta rica en proteínas protege a la mujer en la menopausia del debilitamiento de los huesos y de la osteoporosis, según un estudio presentado en la conferencia anual de la Sociedad de Endocrinología.
Esta enfermedad se caracteriza por la disminución de la masa ósea y un deterioro de su arquitectura, lo cual aumenta la fragilidad de los huesos e incrementa el riesgo de las personas a sufrir fracturas.
«Los huesos sirven como reserva de calcio del organismo. A partir de los 35 años se inicia la pérdida de masa ósea y es necesario tomar las medidas adecuadas para prevenirlo», explicó la nutricionista Viviana Corteggiano.
La osteoporosis afecta tres veces más a las mujeres que a los hombres, en especial después de la menopausia, ya que la disminución de estrógenos altera el metabolismo del calcio.
La enfermedad también afecta a hombres, pero ellos no lo saben. El 90% de los hombres ignora lo común que son las fracturas osteoporóticas en ellos, concluye un estudio de la Fundación Internacional de Osteoporosis.
Según proyecciones de esa organización, para el 2025 habrá 1,65 millones de mujeres con osteoporosis; cifra que aumentará a 2,62 millones en el 2050.
Para Zulema Stolarza, presidenta de la Sociedad Argentina de Nutrición, la clave para prevenir la enfermedad es una dieta balanceada, con alimentos ricos en calcio desde muy temprana edad y, además, actividad física.