Aunque la leche y sus derivados son alimentos que dan lugar a muchos debates últimamente, en este post no voy a tratar el tema de si la leche o los lácteos son imprescindibles en nuestra alimentación, de si producen enfermedades o las previenen»¦ sino si los lácteos están relacionados con el aumento de la mucosidad o la aparición de asma. Lo que si sabemos, con certeza, es que existe una relacion estrecha entre los lacteos y la salud.
¿Qué dice la creencia popular sobre el mucosidad y la ingesta de lácteos?
Existe la creencia por buena parte de la población (e incluso algunos profesionales sanitarios) de que los lácteos (o en concreto, la leche) incrementan la producción de moco en las vías respiratorias superiores e inferiores, sin una explicación clara del mecanismo que produciría esta asociación. Infinidad de personas dejan de tomar lácteos de forma injustificada por esta razón. Por lo tanto, se cree que existe relación entre la leche y el asma. Pero los resultados cientificos, parecen demostrar que tal creencia es falsa.
Entonces, Puedo consumir leche y sus derivados si sufro de asma? Es falso que el consumo de leche aumento la producción de moco?
De acuerdo con algunas investigaciones australianas, la creencia de que el consumo de leche estimula la producción de moco se lleva a cabo en aproximadamente el 30% de la población y en consecuencia se asocia con una reducción del 38% en la ingesta de leche.
En un estudio llevado a cabo en un centro de neumología pediátrica, 330 padres recibieron un cuestionario anónimo con preguntas entorno a la relación entre la leche y la produccion de moco.
Entre estos padres, el 58,5% creía que beber leche aumenta la mucosidad. Estos padres referían que consiguieron esta información a través de pediatras, médicos y otros profesionales de la salud en el 31% de los casos.
¿Qué dicen los estudios sobre la relación entre consumo de leche y mucosidad?
En un estudio, los voluntarios fueron inoculados con el virus del resfriado común y se registraron durante 10 días los síntomas respiratorios y la ingesta diaria de leche. El peso medio de la secreción nasal no aumentó con el aumento de la ingesta de leche. Los autores concluyeron que en adultos sanos con el virus del resfriado común, la ingesta de leche no se asoció con un aumento de los síntomas de tos, congestión nasal o la magnitud de las secreciones.
En un estudio posterior aleatorizado a doble ciego realizado por el mismo investigador, se dio una muestra de leche y otra de placebo (bebida de soja camuflando su sabor para que fuese indistinguible una de otra), y se concluyó que los que creían previamente que la leche aumentaba la mucosidad, experimentaron sensaciones como «tragar mucho» o «saliva más densa» sólo inmediatamente después de beber tanto leche como bebida de soja camuflada.
Entonces, es psicologica la sensación de que el consumo d eleche aumenta la producción de moco?
El efecto por tanto, no era específico de la leche de vaca y se asoció al efecto placebo (la creencia de que estaban consumiendo leche de vaca).
Los autores concluyeron en detectar el aumento de estos síntomas, sólo por parte de los que tenían la creencia de que la leche incrementaba el moco y que éstos se producían después de beber las dos bebidas (leche y bebida de soja). Además, la leche no se asoció con un aumento de las secreciones nasales, los síntomas de la tos, síntomas nasales o congestión.
Otros autores explican que la posibilidad de que el consumo de leche aumenta la viscosidad o espesor del moco podría explicarse por el hecho de que el consumo de una emulsión tal como la leche después de agregarse con la saliva puede afectar a la sensación en la boca y otros aspectos sensoriales y la sensación puede ser confundida con el moco.
¿Qué dice la creencia popular con respecto al asma y el consumo de lácteos?
Existe la opinión generalizada que las personas con asma deben evitar la leche y los productos lácteos.
La idea de que los lácteos empeoran el asma se remonta al siglo XII, al suponer que el consumo de leche estimula la producción de moco en las vías respiratorias y que este aumento de la formación de moco puede resultar en un aumento de la resistencia a las vías respiratorias, agravando los síntomas del asma.
En las terapias alternativas, se les recomienda a las personas con asma, no comer los llamados «alimentos formadores de moco», especialmente todo tipo de productos lácteos.
Siempre, se ha recomendao que las personas asmaticas no consuman leche ni derivados lacteos.
¿Qué dicen los estudios de la relación entre el consumo de lácteos y el asma?
En un estudio que pretendía demostrar si el consumo de leche podía aumentar la broncoconstricción en adultos con asma, los autores fueron incapaces de demostrar de manera convincente que el consumo de leche indujera un efecto broncoconstrictor, independientemente de las percepciones de los individuos estudiados.
Según diversas investigaciones, la ingesta de lácteos no parece agravar los síntomas del asma y la evidencia científica no apoya una asociación entre el asma y el consumo de productos lácteos.
Sin embargo, en casos raros, algunas personas alérgicas a la proteína de la leche de vaca, pueden presentar síntomas similares al asma y manifestarlos después de consumir lácteos.
Conclusiones
En diciembre de 2005, la revista Journal of the American College of Nutrition publicó una extensa revisión sobre el tema y concluyó lo siguiente:
«Las personas que creen que la leche aumenta la formación de moco son más propensos a informar de los cambios en las percepciones sensoriales relacionadas con mucosidad después de beber leche que los que no estén en posesión de la misma creencia.»
«Es posible que la agregación después de la mezcla de una emulsión tal como la leche con la saliva puede explicar en parte esta sensación.»
«Las recomendaciones para abstenerse de los productos lácteos debido a la creencia de que inducen síntomas de asma no son compatibles con el conjunto de pruebas científicas sobre la relación entre el consumo de lácteos y la aparición de asma.»
«Las personas con asma no necesitan evitar el consumo de productos lácteos para controlar los síntomas.»
El Grupo de Revisión, Estudio y Posicionamiento de la Asociación Española de Dietistas-Nutricionistas (GREP-AEDN) también se manifestó al respecto en noviembre de 2011:
No existe relación entre el consumo de leche y la producción de mucosidad, siendo por lo tanto una creencia no justificada mediante pruebas científicas. Tampoco existe relación entre el asma y el consumo de leche y de sus derivados.
Puedo consumir leche siendo asmatico?
La respuesta, de acuerdo a estos estudios, es que si