Seguramente alguna vez has leído en la etiqueta de la caja o de la botella de leche que compran en tu casa estas palabras, pero ¿sabes qué significan?
La pasteurización es un proceso que fue inventado en 1856 por Louis Pasteur. Básicamente comprende 2 fases: una de alta temperatura y otra de enfriamiento.
La primera fase consiste en elevar la temperatura de la leche a 72 ºC durante 15 segundos; inmediatamente después se pasa a la segunda fase o de enfriamiento, en la que se disminuye la temperatura a 2 ºC durante 3 segundos. Con esto se consigue eliminar a las bacterias que producen enfermedades.
Esta leche se puede mantener en buen estado hasta por 5 días en refrigeración.
La ultrapasteurización o pasteurización UHT consiste en elevar la temperatura de la leche a 93 º C durante 3 segundos, ó a 149 ºC por 1 segundo, para después disminuir su temperatura hasta 20 º C.
Con este método la leche se puede conservar por más de tres meses a temperatura ambiente (mientras no se abra la caja).
La homogeneización consiste en romper las partículas de grasa que tiene la leche, de manera que se vea uniforme; si esto no se hiciera, la grasa se iría a la superficie de la leche y tendrías que agitarla o colarla antes de beberla.