INTRODUCCIÓN
La leche es un líquido complejo que contiene muchos componentes en diferentes estados
(solución, emulsión y coloidal); comprender sus propiedades y los cambios que le acontecen
implica un profundo conocimiento de cada uno de sus compuestos y de las relaciones entre
ellos. La medición del pH y de la acidez de la leche, con el objeto de estimar la acidez
desarrollada debida a la proliferación bacteriana, es de uso corriente. A pesar de ser técnicas
de relativa simpleza hay consideraciones en las mediciones y en la interpretación de los
resultados que deben tenerse en cuenta a la hora de clasificar leches. En este trabajo se
presenta un enfoque general teórico del pH y la acidez de la leche y algunos resultados
obtenidos de tanque de tambos, cisternas y silos ubicados en la Cuenca Lechera Central
Argentina.
1- ACIDEZ TITULABLE
1.1- DEFINICIÓN DE ACIDEZ TITULABLE
Lo que habitualmente se denomina acidez de la leche involucra la acidez actual y la potencial.
La acidez actual representa a los grupos H+
libres, mientras que la acidez potencial incluye
todos aquellos componentes de la leche que por medio de la titulación liberan grupos H+
al
medio. Para su determinación se agrega a la leche el volumen necesario de una solución
alcalina valorada hasta alcanzar el pH donde cambia el color de un indicador, generalmente
fenolftaleína, que cambia de incoloro a rosado a pH 8,3 (Singh et al., 1997).
La acidez titulable incluye a la acidez natural de la leche y también a la desarrollada. La acidez
titulable o de valoración es la suma de cuatro reacciones (Figura 1). Las tres primeras
representan la acidez natural de la leche:
-acidez debida a la caseína: representa 2/5 de la acidez natural
-acidez debida a sustancias minerales y a los indicios de ácidos orgánicos: también 2/5
de la acidez natural
-reacciones secundarias debidas a los fosfatos «over run»: 1/5 de la acidez natural
La acidez desarrollada es debida al ácido láctico y a otros ácidos procedentes de la
degradación microbiana de la lactosa, y eventualmente de los lípidos, en leches en vías de
alteración.
Como se ha descripto, la acidez titulable constituye, fundamentalmente, una medida de la
concentración de proteínas y de fosfatos en leches de buena calidad higiénica-sanitaria. Por
consiguiente, para caracterizar la acidez de la leche, el pH de la misma es el parámetro ideal
(Walstra y jenness, 1987).
1.3- FACTORES QUE AFECTAN LA ACIDEZ TITULABLE
La acidez titulable de la leche fresca disminuye conforme avanza el período de lactación y
suele ser baja en la leche mastítica.
1.4- MEDICIÓN DE ACIDEZ TITULABLE
La acidez se mide por titulación y corresponde a la cantidad de hidróxido de sodio utilizado
para neutralizar los grupos ácidos. Este valor puede expresarse de diversas maneras:
– en «grados Dornic» ( °D) que corresponde al volume n de solución de hidróxido de sodio N/9
utilizada para titular 10 ml de leche en presencia de fenolftaleína. Este resultado expresa el
contenido en ácido láctico. Un grado Dornic equivale a 0,1 g/l de ácido láctico ó 0,01%
1
Profesional de la EEA Rafaela
156 Manual de Referencias técnicas para el logro de leche de calidad. 2 º ed., 2005, INTA.
– en gramos de ácido láctico por litro o por kilogramo. Si se utiliza hidróxido de sodio N/9 con
10 ml de leche, el volumen de reactivo en ml da directamente el resultado
Figura 1. Acidez de titulación (extraído de Ch. Alais, 1985).
– en «grado Soxhlet-Henkel» (S.H.), no tiene al ácido láctico como referencia. Equivale a 1 ml
de hidróxido de sodio N/4 utilizado para titular 100 ml de leche; se comprueba que 1 ºSH =
2,25 ºD. Este concepto es más lógico que el anterior ya que la leche fresca no contiene
ácido láctico (Alais, 1985).
Si bien la medición de la acidez de la leche es muy sencilla puede haber cierta imprecisión
debida a:
– la cantidad de indicador utilizado: debe utilizarse siempre 4 gotas
– el punto final de la titulación: no es claro porque depende de la agudeza visual del
operador, debe hacerse una comparación con leche sin indicador o bien introducir un
electrodo de pH y titular hasta pH 8,3 – 8,4
– la coloración rosa desaparece progresivamente
2- pH
2.1- DEFINICIÓN DE pH
El pH (Ecuación I) representa la acidez actual (concentración de H+
libres) de la leche [2],
pH = – log aH+
(I)
donde aH+
es la actividad de H+
. Para soluciones diluidas es posible utilizar concentración de
H
+
en lugar de actividad (Singh et al., 1997). Este es el caso de la leche, donde las
concentraciones de H+ oscilan entre 0,16 y 0,32 µmol/l.
ácidos orgánicos
Acidez desarrollada
Acidez titulable
Acidez natural
Ãcidos orgánicos
Compuestos
minerales
Caseína
«over run»
LECHE FRESCA LECHE ÃCIDA
157 Manual de Referencias técnicas para el logro de leche de calidad. 2 º ed., 2005, INTA.
La leche de vaca recién ordeñada y sana, es ligeramente ácida, con un pH comprendido entre
6,5 y 6,8 como consecuencia de la presencia de caseínas, aniones fosfórico y cítrico,
principalmente (Alais, 1985; Fox y McSweeney, 1998). Estos valores se aplican solamente a
temperaturas cercanas a 25 ºC.
2.2- FACTORES QUE MODIFICAN EL pH
El pH de la leche no es un valor constante, puede variar en el curso de la lactación. El pH del
calostro es más bajo que el de la leche, por ej. pH 6,0 es explicado por un elevado contenido
en proteínas (Alais, 1985). El estado de lactancia también modifica el pH observándose valores
muy altos (mayores a 7,4) en leche de vacas individuales de fin de lactancia.
Por otro lado, valores de pH 6,9 a 7,5 son medidos en leches mastíticas debido a un aumento
de la permeabilidad de las membranas de la glándula mamaria originando una mayor
concentración de iones Na y Cl y una reducción del contenido de lactosa y de P inorgánico
soluble (Alais, 1985).
El pH es altamente dependiente de la temperatura. Las variaciones de la temperatura causan
muchos cambios en el sistema buffer de la leche, principalmente se ve afectada la solubilidad
del fosfato de calcio (Fox y McSweeney, 1998). El pH disminuye en promedio 0,01 unidades
por cada °C que aumenta, fundamentalmente a causa d e la insolubilización del fosfato de
calcio. Esta variación es muy importante considerando el estrecho rango de variación del pH de
la leche.
El pH también puede ser diferente entre muestras de leche fresca de vacas individuales
reflejando ésto variaciones en la composición (Singh et al., 1997). A pesar de todos estos
cambios, el pH varía en un rango muy reducido y valores de pH inferiores a 6,5 o superiores a
6,9 ponen en evidencia leche anormal.
El equilibrio ácido-base en la leche es influenciado por las operaciones de procesamiento. De
esta manera, la pasterización causa algunos cambios en el pH debido a la pérdida de CO2 y a
la precipitación de fosfato de calcio. Tratamientos térmicos severos (superiores a 100 ºC)
resultan en una disminución del pH debido a la degradación de la lactosa a varios ácidos
orgánicos, especialmente a ácido fórmico. La concentración de la leche por evaporación de
agua causa una disminución en el pH cuando la solubilidad del fosfato de calcio es excedida,
resultando en una mayor formación de fosfato de calcio coloidal (Fox y McSweeney, 1998).
2.3- MEDICIÓN DE pH
La medición potenciométrica del pH con un «pH-metro» es la única medida precisa. La
regulación de estos aparatos se hace con soluciones buffer de pH conocido, en general se
usan dos soluciones: una de pH 7 para la zona neutra y otra de pH 4 para la zona ácida. La
determinación del pH tiene un inconveniente para su utilización en las plantas lácteas: si en la
superficie de la leche existe una película grasa, ésta forma una lámina sobre los electrodos que
los aísla del medio y hace que no se registre respuesta en el equipo. En ese caso se debe
lavar los electrodos con una solución detergente (Alais, 1985).
Otro método para medir pH es el uso de papeles o cintas indicadoras embebidas en soluciones
colorantes que cambian de color según el pH de la leche. Estos resultados son muy
aproximados (Alais, 1985).
3- INTERPRETACIÓN DEL pH Y DE LA ACIDEZ TITULABLE
Para identificar leches acidificadas se suele emplear la determinación de acidez titulable pero
para tal situación se debería poder medir la acidez desarrollada o sea medir ácido láctico pero
no existe una técnica rápida y precisa para ello. Como la acidez desarrollada es consecuencia
de la acción de bacterias fermentadoras de la lactosa (bacterias lácticas) que producen un
aumento de la concentración de ácido láctico, puede utilizarse la medición conjunta de pH y
acidez titulable para estimar la acidez desarrollada. Valores de acidez titulable por encima de
22 º D y pH inferiores a 6,5 ponen en evidencia leche en vías de alteración por acción de
158 Manual de Referencias técnicas para el logro de leche de calidad. 2 º ed., 2005, INTA.
microorganismos. Este resultado debería corroborarse con la determinación del recuento total
de bacterias, que aunque no sea una medición directa del número de bacterias lácticas, tiene
una correlación alta con ese grupo de bacterias (ver capítulo «Contaminación bacteriológica de
la leche: causa y control»).
El pH y la acidez por titulación son dos medidas no estrictamente asociadas. El pH al ser una
medida de la acidez actual de la leche se relaciona mejor que la acidez titulable con la
estabilidad de la leche frente a tratamientos térmicos en la industria .
A un mismo pH y, consecuentemente a la misma estabilidad frente a tratamientos industriales,
dos leches pueden presentar valores de acidez diferentes. De esta manera, ciertas leches con
acidez natural elevada pero pH normal podrían ser eliminadas si sólo se considera la acidez
por titulación (Figura 2). Estas leches pueden presentar una mejor aptitud y calidad que leches
con menor acidez, especialmente en relación a su estabilidad térmica (Alais, 1985).
Inversamente leches con una misma acidez pueden tener pH diferente. En la Figura 2 puede
verse que si una industria realiza una clasificación rigurosa sólo en función de la acidez, las
leches 1 y 2 serían eliminadas; en el caso de la n º 1 su eliminación sería acertada ya que
realmente tiene acidez desarrollada pero en el caso de la n º 2 sería un error porque se trata de
una leche con alto contenido de extracto seco, la cual por contener alta concentración de sales
fosfato, está fuertemente tamponada evitando variaciones del pH debido a la fermentación de
la lactosa, lo que retrasa su alteración. En relación a ello, leches de elevada acidez natural se
conservan más tiempo que leches de la misma calidad higiénica, pero de débil acidez.
Figura 2. Significado del pH y de la acidez (extraído de Ch. Alais, 1985)
1) Leche en vías de alteración, con acidez desarrollada: pH 6,3 acidez 22 ºD
2) Leche rica, sin acidez desarrollada: pH 6,7 acidez 22 ºD
3) Leche de tipo medio, sin acidez desarrollada: pH 6,7 acidez 18 ºD
4) Leche pobre, sin acidez desarrollada: pH 6,7 acidez 14 ºD
5) Leche alcalina (mastitis): pH 7,2 acidez 14 ºD.
Hay pruebas muy sencillas y rápidas que se han utilizado para clasificar leches de acuerdo a la
acidez:
a) Prueba de alcohol: existe buena correspondencia entre el resultado de esta
prueba y leches con acidez desarrollada. A pesar de ello, resultados de la
prueba de alcohol positivos en leches sin acidez desarrollada han aparecido y
leche de buena calidad ha sido rechazada (Chavez et al., 2004; Negri et al.,
2001) (ver capítulo «Factores que afectan la estabilidad térmica y su relación
con la prueba de alcohol»). Esta situación establece una limitante muy
30
20
10
0
Acidez titulable ( ºD)
6 7 8 9
pH
22 ºD
18 ºD
14 ºD
pH 8,4: viraje de
la fenolftaleína
1
2
3
4
5
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importante en el uso de la prueba haciendo necesaria la medición de pH en las
muestras.
b) La prueba de ebullición: se colocan 2 ml de leche en un tubo de ensayo y se
calienta a baño maría durante 5 minutos. Si se observa la coagulación de la
leche el resultado de la prueba es positivo. De la misma manera que en el caso
anterior, existe buena relación entre esta prueba y leches ácidas pero no es la
única situación en que puede presentarse resultado positivo de la prueba.
Estas pruebas tienen la ventaja de ser sencillas y rápidas e implican menor complejidad que las
determinaciones de pH, acidez y de calidad bacteriológica, lo cual posibilita su uso en tambos.
El resultado es orientativo y los casos positivos deben ser confirmados con determinaciones de
pH y acidez en la industria.
4- ESTADÃSTICAS DESCRIPTIVAS DEL pH Y DE LA ACIDEZ DE LECHE DE LA CUENCA LECHERA
CENTRAL ARGENTINA
Los resultados que se presentan en este trabajo corresponden a muestras obtenidas a tres
niveles de la cadena de procesamiento de la leche: tambo, cisterna y silo.
Los resultados a nivel de tambo obedecen a un período de toma de muestra desde mayo de
1999 a julio de 2000. Las muestras se obtuvieron del tanque de acopio de 62 tambos en el
momento de su entrega al transporte. El tamaño promedio de los tambos fue 2.111 l/tambo/día
y el desvío estándar (DE) fue ±1.200 l, la temperatura promedio de la leche fue 4,5 ºC y el DE: ±
3,8 ºC y estuvieron repartidos uniformemente en la Cuenca Central Argentina. En total se
estudiaron 1352 muestras.
Las muestras de cisternas se obtuvieron en el período desde julio de 1997 a junio de 1998. Se
tomaron muestras mensuales de la leche contenida en 37 cisternas de recolección en el recibo
de cinco industrias lácteas ubicadas en la cuenca. En promedio, cada cisterna recogía leche de
15 tambos, el volumen de las mismas fue de 7.600 l, la temperatura de la leche fue de 8 ºC y se
analizaron 384 muestras. Las cisternas seleccionadas recogían leche con menos de 24 hs de
almacenamiento en tambo y lograron representatividad del área sin superposición de
recorridos.
Las muestras de leche de silo fueron provistas por dos industrias locales y fueron colectadas
dos veces por mes desde abril de 2000 hasta abril de 2002 de los silos de recepción de leche.
El volumen promedio de la leche contenida en cada silo fue de 250.000 l. Se procesaron 77
muestras.
Los promedios geométricos del recuento de bacterias totales (RBT) fue 74.100 y 74.000 ufc/ml
para tambos y cisternas, respectivamente (Taverna et al., 2001). En silos el promedio
geométrico del recuento de bacterias coliformes fue 8.356 ufc/ml. Estos resultados evidencian
una buena calidad bacteriológica de la leche.
Las estadísticas descriptivas de pH y acidez en tambo, cisterna y silo se presentan en la Tabla
1. Puede observarse que la mayor variabilidad en las determinaciones de pH se registró a nivel
de tambos y la menor a nivel de silos. Lo cual resulta razonable teniendo en cuenta el efecto
mezcla de leche que puede presentarse en silos. En relación a lo cual es llamativo el valor
elevado obtenido para acidez en silo. Debe considerarse en este caso que la determinación de
acidez está sujeta a la apreciación visual del punto final por cada operador, lo cual introduce
mayor error a la medición.
Tabla 1. Estadísticas descriptivas de pH y acidez en leche de tambo, cisterna y silo de la
Cuenca Central Argentina
Parámetro
estadístico
tambo cisterna silo
pH Acidez pH Acidez pH Acidez
N 557 1293 384 387 72 74
Media 6,68 14,71 6,77 14,66 6,69 16,15
160 Manual de Referencias técnicas para el logro de leche de calidad. 2 º ed., 2005, INTA.
DS 0,15 1,08 0,10 1,03 0,04 1,37
IC 95% 0,01 0,06 0,01 0,10 0,01 0,32
Máx. 7,09 20,0 7,00 22,74 6,83 21,0
Mín. 5,30 11,61 6,40 12,33 6,57 13,5
En base a lo detallado anteriormente, el análisis de los comportamientos estacionales de pH y
acidez se realizó sólo a nivel de tambos. El pH en leche de tambo presentó cambios
estacionales (Figura 3). En invierno se obtuvieron valores de pH significativamente mayores
que en la primavera y en el otoño (p<0,05).
Los valores de acidez de leche de tambos correspondientes al verano fueron significativamente
mayores a los de otoño y primavera (p<0,05) (Figura 4).
Como se detalló anteriormente, pH y acidez no miden lo mismo. Lo cual fue corroborado a
través de los bajos valores de los coeficientes de correlación entre ambas variables obtenidos
en leche de tambo (r=0,22), cisterna (r=-0,12) y silo (r=-0,24) y la falta de correlación en los
cambios estacionales observados.
En las muestras de leche de tambo con pH menor que el normal (<6,6) y acidez mayor a la
normal (>18 ºD) se pudo determinar que la causa de ambos comportamientos era un RTB
superior a la media (valor promedio del grupo, n=6, 600.000 ufc/ml).
Figura 3. pH en leche de tambos por estaciones
Figura 4. Acidez en leche de tambos por estación.
13
13,5
14
14,5
15
15,5
16
16,5
17
oto inv prim ver oto inv
estación
acidez ( ºD)
tambos 1999-2000
6,4
6,55
6,7
6,85
7
inv prim ver oto inv
estación
pH
tambos 1999-2000
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CONCLUSIONES
La acidez natural de la leche, principal componente de la acidez titulable, es explicada por las
proteínas (principalmente caseínas), los fosfatos y los citratos. Por lo tanto, para definir la
acidez de la leche sería más apropiado el uso del pH en lugar de la acidez titulable con el
objeto de caracterizar la leche según la resistencia a tratamientos térmicos en la
industrialización.
Los valores de pH no presentaron correlación significativa con los de acidez en leche de tambo,
cisterna y silo.
En tambos, los valores de pH más bajos se registraron en otoño y la mayor acidez titulable se
observó en verano.
Sólo en el caso de leches con elevado recuento de bacterias totales, elevada acidez y bajo pH
éstas dos últimas variables presentaron cierto grado de asociación.