El frozen yogurt de las estrellas El frozen yogurt de las estrellas El frozen yogurt de las estrellas El frozen yogurt de las estrellas El frozen yogurt de las estrellas El frozen yogurt de las estrellas El frozen yogurt de las estrellas
Los alrededores de la tienda Pinkberry en California resultaron uno de los sitios favoritos para los paparazzi. Eran una especie de carnada para las estrellas. ¿Qué los atraía? Cuando nació la tienda, en el año 2005, entre los famosos empezó a correr la voz del particular sabor de los yogures helados de ese local.
Si bien ya estaba la moda del derivado de los lácteos, la nueva empresa hizo su interpretación del producto y creó un frozen yogurt a base de yogur descremado y leche descremada, el cual también propone sabores que se nivelan entre lo ácido y lo dulce. Ese gancho entre ambas sensaciones fue clave para el éxito de la marca, que hace poco llegó a Panamá
La opción de tener al alcance un postre que refresca de forma ligera a quien lo consume está en Costa del Este. Este local recibe su materia prima de Estados Unidos, con la que preparan los productos con apego a los lineamientos de la franquicia, que cuenta con 265 tiendas alrededor del mundo distribuidas en 21 países.
Los sabores de Pinkberry impactan al paladar pero no lo abruman, así como su contextura es firme, lo que atiende a los cuidados con que es manufacturado y conservado antes de ser servido.
Los sabores de los yogures helados pueden variar según el país donde esté la tienda, ya que se aprovechan las frutas de la temporada para ampliar la oferta. De hecho uno de los estándares de la compañía es que estas frutas sean frescas.
La deliciosa crema helada puede hallarse en sabor clásico, chocolate avellana, granada, mango, entre otros. Estas notas pueden disfrutarse solas, pero no está de más un acompañante, o cuatro, como lo permite el precio pagado por los toppings .
Y en la categoría de los toppings hay otro mundo por descubrir. Ese sector de la vitrina puede ser vista como una letanía a los caprichos del paladar. Por momentos uno se puede sentir como niño travieso que vio su oportunidad para darse gusto. En ese espacio se observan Honey nut cheerios, milk chocolate crunch (un clásico), almond roca, nutella, Cap» n crunch, chispas de colores, chispas de chocolate, pirulines de avellana, ositos de frutas (estas adorables piezas son un éxito con el yogur clásico), coco rayado, mini M&M, granola y la lista puede seguir. En caso de que cuatro de estas opciones no sean suficiente puede agregarle leche condensada, sirope, entre otros ingredientes líquidos dulces.
El menú también ofrece smoothies y parfait , este último está compuesto por seis capas que pueden ser seleccionadas a gusto del cliente.
Ninguno de estos caprichos debe causar un remordimiento muy profundo, puesto que tienen bajo contenido calórico. El yogur helado chico tiene 155 calorías sin toppings y con t oppings, 201.. El mediano, 250 calorías y con toppings, 345. Mientras que el grande 410 y con toppings, 550.
Ésta es la primera tienda de Centroamérica y en pocas semanas se espera la apertura del nuevo local en avenida Balboa.