Recomienda siete porciones de yogurt a la semana, lo que equivale a uno al día
Este lácteo es una fuente primordial de calcio y proteínas que ayudan a mantener el peso
GUADALAJARA, JALISCO (14/MAY/2015).- Seguramente por ahí escuchaste que los lácteos lejos de aportar proteínas y otros nutrientes sólo inflaman el estómago y son menos eficaces que otros tipos de alimentos vegetales o animales, pero desecha por la borda esas hipótesis. Es verdad que para los intolerantes a la lactosa, los productos que contienen leche pueden inflamarlos o causarles malestares, pero hoy en día hay una serie de alimentos como el yogurt que están libres de lactosa o son bajos de esta porque contienen microorganismos vivos que ayudan a la flora intestinal.
Según cuenta la doctora Erika Ochoa Ortiz, nutrióloga pediatra y directora del departamento de nutrición del Tecnológico de Monterrey (TEC), campus ciudad de México, el yogurt es una fuente primordial de calcio y proteínas que ayudan a quienes lo consumen a mantener el peso, incluso puede prevenir el síndrome metabólico (obesidad, enfermedades cardiovasculares y diabetes tipo dos), claro su ingesta tiene que ser de una porción al día y acompañado por alimentos saludables como las frutas y colaciones como almendras y nueces.
«Si cambiamos nuestra disponibilidad por los alimentos saludables vamos a tener que elegir con mayor facilidad estos alimentos que nos hagan un bien y ese es el caso del yogurt porque nos va a conferir mucha más nutrición en menos calorías, a que me refiero, a que el yogurt es rico en calcio, proteínas, tiene microorganismos vivos, tiene bajo contenido de lactosa, lo pueden comer personas con intolerancia a ella y el aporte de calorías es bajo».
Es cierto que hay yogurts azucarados porque a los mexicanos les encantan los alimentos dulces, pero explica la especialista que las empresas ya están modificando sus portafolios para ir disminuyendo el contenido de azúcar de estos productos. No es que estos alimentos no tengan las misma particularidades que el yogurt natural, pero ciertamente los azucares no son tan benéficos en la salud sobre todo si se quieren prevenir enfermedades cardiovasculares.
«En México ha sido difícil eliminar el azúcar de la gran mayoría de los productos, pero al final es el gusto de cada persona y podemos elegir un producto ideal para nosotros tanto para nuestro gusto como para un estilo de vida».
La doctora también enfatiza que ciertamente hay alimentos que proveen de proteínas como las que el yogurt brinda, pero no así de calcio, y en ese sentido el yogurt tiene altos porcentajes de este nutriente imprescindible para la estructura ósea.
«Está demostrado que en México las personas que no consumen lácteos no cubren su requerimiento de calcio y eso los pone en riesgo tanto en su salud ósea, como también hay algunos estudios que sugieren que las personas que no tienen suficiente calcio tiene mayor riesgo de sobrepeso y obesidad. Eliminar los lácteos de la dieta no es una recomendación».
Mejora tu estilo de vida
La doctora recomienda siete porciones de yogurt a la semana, lo que equivale a uno al día, debes combinarlos con otros alimentos de origen vegetal y animal y calibrarlo con ejercicio, que es muy importante evitar el sedentarismo y mantenerse físicamente más saludable para que la energía rinda al cien por ciento.
Erika explica que al yogurt se le ha condicionado como un alimento elitista, sin embargo hace hincapié en desehacer esa idea ya que es un producto muy barato y al alcance de todos, «hay botes desde dos pesos». Ciertamente también ve que en el estilo de vida lo consumen más las mujeres que los hombres y esto va asociado a que es porque se ve como un producto de cuestiones estéticas, pero tiene los mismos beneficios para el público masculino como el femenino.
Aunque no hay una cultura de consumo que es lo que se desea fomentar ya que en México se comen ocho kilogramos de yogurt al año por persona, en países como Holanda el consumo es de 38 kilogramos per cápita. Aún así sabe que en un sector de la población ya hay una responsabilidad de llevar un estilo de vida más saludable que se ha adoptado como una moda saludable.
«Me gustaría pensar que es una moda positiva y que debería aplicarse en toda la población, pero creo que es un sector muy especifico el que está empezando a tomar conciencia, independientemente de esto creo que es parte de la transición de evitar las enfermedades crónicas e infecciosas por medio de una alimentación saludable. Hoy en día seguimos con una prevalencia muy alta de sobrepeso y obesidad y también de enfermedades como diabetes y cardiovasculares muy altas, los cambios que tenemos que hacer van muy relacionados con nuestra actividad física y la alimentación».