Nuestras recetas light son ideales para cuando tienes invitados y quieres quedar como una profesional de la cocina. Ésta vez, te proponemos que empieces tu menú con una sopa fría. Ya sé que ahora no apetece tanto con el frío, pero en casa es muy fácil de preparar porque se hace con los ingredientes que de normal reservamos para la ensalada.
Nuestra Sopa de pepino fría con yogurt no necesita cocción y la puedes tener hecha con antelación, hecho que nos viene muy bien para poder disfrutar de la reunión con nuestros amigos o familiares, se hace en media hora y tan sólo nos aporta 85 kilocalorías por ración. Sabemos que donde se cargan las tintas es en el postre, que suele ser muy calórico y por eso queremos que empieces con un plato light de diez.
Ingredientes.
4 pepinos.
2 yogures griegos.
Unas ramitas de eneldo fresco.
Aceite de oliva virgen extra.
Sal.
Pimienta.
Si te resultan un poco amargos, lo que puedes hacer con los pepinos es lavarlos y cortarlos por la mitad a lo largo. Espolvoréalos con sal, déjalos reposar 5 minutos y, luego, lávalos de nuevo.
Si te gusta ese sabor amargo, pasa directamente ya a este paso. Despúntalos, pélalos y corta 8 láminas muy finas con un pelador o rallador plano. Pasa el resto por un rallador de orificios finos. Lava y seca el eneldo. Reserva unas hojitas para la decoración y pica el resto.
Dispón el yogurt, el pepino rallado y el eneldo en un cuenco grande. Sazónalo y remueve bien hasta que se incorporen todos los ingredientes.
Reparte la sopas en 4 boles individuales y sírvela fría, decorada con las láminas de pepino que teníamos reservadas. Puedes hacer con ellas un rulito y superponerlas en el centro del bol con algunas hojas de eneldo y un hilo muy fino de aceite de oliva virgen extra.
Si no te gusta encontrarte trocitos en la sopa y prefieres que resulte más una crema, puedes pasar el yogurt y el pepino rallado por la batidora, añadir el eneldo y emplatar. Quedará igual de bueno.