Ya nos hemos ocupado de forma mas o menos extensa del kefir. En concreto, hemos conocido algunos de sus secretos, las diferencias existentes entre este y el yogurt, y sus propiedades terapeuticas; especialmente, al ser importante en el reestablecimiento de la flora intestinal.
Sin embargo, hoy iremos mas alla, y te ofrecemos una serie de trucos que nos ayudaran a conservar, de la mejor forma posible, los distintos nodulos.
Si en cierto sentido, no se puede renovar su cultivo periodicamente, bien por falta de medios de cultivo, o incluso por ausencias, existen una serie de tecnicas fundamentales para preservar, en su mejor “formaâ€, el estado de los nodulos del kefir.
Estas tecnicas se traducen en conservacion tanto en humedo (por algunos dias) como en seco, lo que da la posibilidad de conservacion durante varios meses.
CONSERVACIoN EN HuMEDO
La primera de ellas (recordemos, conservacion en humedo, solo por algunos dias), se pueden dejar los granulos en agua azucarada, especialmente usando agua sin cloro, filtrada o destilada. Se coloca dentro de un recipiente cerrado, dejando un suficiente espacio vacio.
Eso si, para reactivarlos, se debe luego lavar bien, e iniciar nuevamente el cultivo. Incluso ademas, pueden ser congelados, siempre y cuando esten bien escurridos y colocados en una bolsa de plastico, o en un frasco de vidrio.
Truco: Mientras mas baja sea la temperatura de congelamiento, mucho mejor, pues se mantienen las distintas propiedades de los granulos. Ademas, para reactivarlos, es necesario macerarlos un total de 12 horas en agua azucarada antes de iniciar su cultivo.
CONSERVACIoN EN SECO
Para secar los distintos granulos, estos deben ser extendidos sobre un plato, siendo cubiertos con una servilleta de papel, y colocandolos en un lugar preferentemente ventilado.
El tiempo dependera de la humedad ambiente y la ventilacion, pudiendo notar que estan bien secos cuando se los nota no pegajosos, y cristalizados.
Truco: De esta forma pueden durar varios meses. No obstante, y para poder rehidratarlos, bastara unicamente con ponerlos en agua azucarada a temperatura ambiente, durante solo 12 horas.