Escuchamos hablar mucho de el, de sus beneficios, pero no lo encontramos en cualquier comercio. Se relaciona con lo vegetariano, lo ecologico… y cuando conocemos lo que es, ponemos caras raras, como desconfiando de su origen y de su modo de elaborarlo. Ademas de lo saludable que es, simplemente debemos leer bien la procedencia de este alimento o del hongo con el que lo vamos a hacer. Asi que aprende, anota y lanzate a disfrutar del kefir y de sus propiedades.
Se trata de un producto lacteo que, a diferencia del yogur, fermenta mediante una reaccion lacto-alcoholica. Aunque la definicion tecnica es la de una combinacion de bacterias probioticas y levaduras en una matriz de proteinas, lipidos y azucares. Es decir, es un lacteo fermentado mediante hongos y bacterias procedentes del Caucaso. Para que sepas el aspecto que tiene, se suele decir que parece un trozo de coliflor.
Existen dos tipos de kefir: por un lado el de leche y por otro el del agua. El primero se asemeja mucho al yogur y el segundo es una bebida que sabe como una limonada pero con gas. Este ultimo lo pueden tomar los alergicos a la leche. Y se debe tomar en ayunas o antes de las comidas para asimilarlo mejor.
Las propiedades de este producto son casi infinitas. Ayudan a reducir el colesterol, protege el estomago, ayuda a mejorar el ritmo intestinal, es decir que es digestivo, y fortalece las defensas. Ademas es muy diuretico y depurativo.
Para elaborar el de agua necesitas 1 litro de agua mineral, 3 cucharadas grandes de azucar blanco o moreno, 1 higo seco, medio limon cortado a trozos, 3 cucharas del nodulo del Kefir. Introducimos todo esto en un frasco, lo agitamos bien y lo dejamos fermentar entre 2 y 3 dias.
Para elaborar el de leche necesitas unos granos de kefir, leche de cualquier tipo aunque si eliges la desnatada sale un kefir muy diluido, y un tarro de cristal. Cierralo y dejalo 1 dia minimo. Cuanto mas lo dejes, mas espeso y fuerte sera. Luego, para disfrutarlo, cuelalo.