¿Conoces qué tipo de quesos hay y en cuál categoría caen tus quesos preferidos? Esto podría ayudarte a saber cuáles quieres en grandes cantidades y cuáles en más pequeñas.
¿Alguna vez les ha pasado que deciden huir de ciertos quesos desconocidos porque no saben exactamente si su sabor les va a agradar? A mí me ha pasado, y la verdad es que no me gustaría que se pierdan de algunos generosos sabores por eso.
La verdad es que tenemos una relación un poco extraña con el queso. Lo amamos, pero a la vez hay algunos que nos dan un poco de miedo. Sin embargo, las chicas de Quesería de mi nos explicaron de manera básica cuáles son los tipos de quesos, además de algunos ejemplos. Ya basándote en este información, podrás aventurarte con más confianza a probar otro tipo de quesos. Y sobre todo, acompaña esas tablas de quesos con un poco de vino tinto.
Quesos frescos
Quesos sin añejar, suaves, frescos y con sabores delicados. Su gentil proceso de elaboración logra un queso ligero e incluso untable que puede ser tan versátil como la mantequilla. En el caso de los quesos de cabra, entre más se añejen, sus sabores madurarán y su textura será más firme.
Algunos quesos frescos son: Mozarella, burratta, mascarpone, ricotta, queso panela, queso Oaxaca, queso de cabra, queso fetta.
Quesos azules
Marmoleados de tonos azules y verdes, con mucho cuerpo y olores fuertes. Madurados en lugares húmedos, para lograr sus características esenciales. Estos quesos varían en texturas, desde quesos quebradizos hasta cremosos. Los sabores igualmente varían desde un queso dulce hasta uno picante.
Algunos quesos azules son: Roquefort, stilton y gorgonzola.
Quesos semi-curados
Quesos añejados durante varios meses, en su mayoría tienen una corteza gruesa o son cubiertos por cera para mantener su humedad. Las texturas pueden ir desde semiduros hasta firmes, mientras que los sabores se intensifican conforme ven madurando.
Se caracterizan por sus esencias de flores y pastizales de las montañas en las que normalmente son producidos.
Algunos quesos semi-curados son: Gouda, emmental, manchego, gruyere, y cheddar.
Quesos cremosos
Con textura cremosa por dentro y una corteza blanca y aterciopelada por fuera, con sabores versátiles que varían en base a su proceso de maduración.
Algunos quesos cremosos son: Camambert y brié.
Quesos curados
A diferencia de los quesos semi-curados, estos pueden llegar a ser añejados durante años, logrando sabores más intensos y complejos, con notas de frutas, especias y nueces. En estos quesos se aplican diferentes técnicas de conservación, tales como el salado o ahumado agregando notas interesantes de sabor.
Algunos quesos curados son: Parmesano, grana padanno, pecorino, assagio y manchego curado.
Así, seguro ya tienen de dónde elegir cuando quieran hacer una tabla variada de quesos, una deliciosa opción elegante para complacer a sus invitados. Lo importante es que no tengan miedo de los nuevos sabores, al menos ya tienen una guía para probar y aventurarse, que es lo que importa. Y estén pendientes, porque pronto publicaremos una guía para hacer una tabla de quesos perfecta.