Los productos LACTAID®, ¿pueden ayudarte con la sensibilidad a los lácteos? Si eres intolerante a la lactosa, la respuesta es ¡sí! Aunque quizás no estés seguro de qué sea lo que te esté causando sensibilidad. ¿Es intolerancia a la lactosa, síndrome del intestino irritable (IBS) o alergia a la leche? Aquí te presentamos un breve resumen sobre las tres afecciones:
Intolerancia a la lactosa: una deficiencia en el cuerpo de una encima natural llamada lactasa que puede causar síntomas como gases, inflamación y diarrea al ingerir alimentos con lactosa. La lactasa es necesaria para digerir completamente la lactosa, un azúcar presente principalmente en los productos lácteos. Conoce más sobre la intolerancia a la lactosa.
IBS: un desorden intestinal que causa molestias abdominales y síntomas como diarrea y constipación. No se conoce la causa exacta del IBS. Conoce más sobre el IBS en Mayo Clinic.
Alergia a la leche: cuando el sistema inmunológico no reconoce una o más proteínas de los productos lácteos, más comúnmente el suero y la caseína, como inofensivas. Conoce más sobre las alergias a la leche en Mayo Clinic.
Los productos lácteos sin lactosa de LACTAID® ayudan a que las personas intolerantes a la lactosa digieran fácilmente y disfruten a diario. Pero como con cualquier diagnóstico médico, deberías hablarlo con tu médico.