Muchas son las personas que abandonan el hábito de consumir leche porque quieren cuidar la linea o porque cierta vez le recomendaron consumir leche desnatada pero esta no les apetece, sin embargo, entre la leche entera y la desnatada sólo cambia un poco el porcentaje de grasa y las calorías.
Entonces, si no te agrada la leche desnatada, consumela entera, la diferencia entre un vaso de leche desnatada y un vaso de leche entera son alrededor de 7 gramos de grasa lo cual implica unas 63 calorías más en esta última, algo no muy significativo en el balance calórico total. Si consumimos leche semidesnatada, porque no nos agrada con nulo contenido graso, tampoco debemos preocuparnos, porque aquí la diferencia es inferior, apenas 3 gramos más de grasa por vaso, es decir, menos de 30 calorías.
Si porque no nos agrada la leche desnatada o semidesnatada acabamos eliminando de la dieta a este alimento, será mejor consumirla entera, pues la leche no varía mucho en su composición cuando es entera y puede ofrecernos valiosos nutrientes para el organismo.