¿Deberíamos escribir yogur o yogurt? ¿Existe más de una forma correcta? ¿Hay variantes? ¡Te lo contamos!
Yogurt, yogourt, yoghurt, yoghourt o incluso yagurt, Hay una vacilación ortográfica a la hora de nombrar (y sobre todo de escribir) la palabra yogur. La RAE no vacila. Recomienda como escritura correcta del término únicamente la forma yogur, adaptación del francés yogourt que, a su vez, proviene del término turco yoÄŸurt.
Yogurt vs Yogur: Historia de una palabra
Todas las historias son dos historias. La historia en sí, es decir, el conjunto de acontecimientos sucedidos y la historia de cómo esos sucesos llegaron a tener un nombre. La historia de los productos es la historia de su descubrimiento, de su evoución, de su mejora… pero también la historia de cómo estos productos llegaron a tener el nombre con el que los hemos llegado a conocer.
En el caso del yogur, los orígenes del productos se difuminan. Su procedencia se remonta más allá de los límites en los que la historia adquiere cierta precisión. No podemos identificar con seguridad un inventor, ni siquiera un origen geográfico. Es probable (pero no seguro) que el yogur surgiese de forma espontánea. Varios pueblos antiguos utilizaban odres fabricados con pieles de cabra que utilizaban para transportar líquidos, como el agua o la leche. Una teoría bastante extendida es que el yogur habría surgido de forma involuntaria, al transportar leche en un odre en el que habitarían cultivos de Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus thermophilus, las bacterias responsables de la fermentación de la leche que da como resultado el yogur.
A principios del S XX empezó a crecer extraordinariamente la popularidad del yogur en todo el mundo, entre otras cosas gracias a la labor de investigación y difusión realizada por el eminente microbiólogo ruso Iliá Méchnikov, premio nobel de medicina
Etimología del yogur
El origen del producto entra dentro del campo de la especulación, pero sí podemos rastrear el origen del término y, por tanto, la historia de cómo pasó de lo accidental a lo cultural. La palabra yogur proviene de Turquía, el término yoÄŸurt es una derivación del verbo obsoleto yoÄŸurmak, que significa ‘amasar’.
La letra ÄŸ se transcribía habitualmente como gh en la transliteración latina antes del año 1928, cuando se cambió el alfabeto árabe por el turco-latino. En turco moderno esta letra casi no se pronuncia, lo que genera una pronunciación /joˈuɾt/ semejante a la forma francesa (yaourt) del término.
Yogurt o Yogur: Las raíces de la confusión
El diccionario panhispánico de dudas advierte de la necesidad de evitar grafías como yoghourt, yogourt, yoghurt y yogurt, que son poco acordes con el sistema gráfico español. Seguramente la duda más frecuente a la hora de escribir yogur es la vacilación con el término yogurt. Es probable que por influencia del término inglés: yogurt. En inglés también son frecuentes las formas yoghurt o yoghourt
Un truco muy sencillo a la hora de recordar la forma correcta de escribir el término es pensar en el plural. El plural de yogur (yogures) resulta natural para el hablante hispano, mientras que convertir en plural la palabra yogurt siguiendo la regla común (añadir -es para palabras acabadas en consonante) produce la voz «yogurtes», de fonética extraña para el hablante hispano.
Existe la tentación de hacer el plural, simplemente, añadiendo una -s al final (pasar de yogurt a yogurts), igual que se hace con otras voces de origen extranjero (por ejemplo: boicot o argot) pero este no es el caso de yogur. Otros términos terminados en t que forman el plural añadiendo -s terminan en vocal + t, que sí es una terminación relativamente frecuente, y se utiliza en palabras que, aunque puedan ser de origen foráneo, está muy asentadas en el idioma (es el caso del galicismo: carnet) o en neologismos (disquet). Pero el uso de una doble vocal al final de palabra no se corresponden con la norma habitual.
El nombre del yogur alrededor de España
Un pequeño viaje linguístico por España nos revela que, a la confusión de la grafía en castellano puede contribuir el hecho de que, en otras lenguas del estado, existan similitudes con la voz anglosajona. En catalán el término iogurt conserva la «“t final del turco (yoÄŸurt) o el inglés (yogurt). Lo mismo sucede con el euskera (jogurt). En gallego el término iogur también suprime la t, pero, igual que el catalán, transforma la y (que no existe en estos idiomas) en el diptongo io-.
Español: yogur
Gallego: iogur
Euskera: jogurt
Catalán: iogurt
Inglés: yogurt, yoghurt, yoghourt