Los antibióticos han sido utilizados durante años para el tratamiento de enfermedades infecciosas como la mastitis en las vacas. Sin embargo, los residuos de antibiótico pueden tener un efecto negativo sobre la salud humana en términos de resistencia a antibióticos, alergia e hipersensibilidad. Los residuos de antibióticos también pueden plantear un problema importante a la industria láctea, al inhibir los cultivos starter, y causar tiempos de fermentación más largos. En el peor caso, esto puede dar como producir una ausencia total de fermentación.
Las industrias lácteas cada vez son más conscientes del peligro de los residuos de antibióticos, al igual que los consumidores exigen productos lácteos más puros. Chr. Hansen ofrece una gama completa de Test Kits de antibióticos de alta sensibilidad para ayudar a controlar los efectos negativos de residuos de antibióticos, y potenciar el control de proceso en la industria láctea.