Desde el punto de vista de funcionalidad todos los alimentos, procesados o no, cumplen un papel fisiológico en el organismo por las sustancias nutritivas que contienen.
A partir de la década de los ochenta del pasado siglo XX, surgieron a escena los llamados alimentos funcionales, refiriéndose a aquellos productos alimenticios que proveen al organismo una ventaja de salud adicional a la que dan sus nutrientes o nutrimentos.
De acuerdo con ILSI-Europa (1995), «un alimento puede ser considerado funcional si logra demostrar científicamente que posee efectos beneficiosos para la salud sobre una o más funciones del organismo, más allá de sus propiedades nutricionales habituales, de modo tal que mejore el estado general de salud o reduzca el riesgo de alguna enfermedad o ambas cosas».
Alimentos para la salud no es un concepto nuevo, desde las primeras civilizaciones existe la creencia de que ciertos alimentos podían favorecer la salud. Ya en la antigua civilización griega Hipócrates mencionaba la relación entre la alimentación y las enfermedades.
– See more at: http://sialaleche.org/lacteos-como-alimentos-funcionales-y-su-papel-en-la-prevencion-de-algunos-padecimientos/#sthash.4YpK0Y5c.dpuf