:Buenas y salsas gente linda. Una vez más nos encontramos para seguir transitando el camino de la alimentación sana. Pero antes de comenzar voy a calentar el agua para tomar unos matecitos porque los prefiero antes que la leche. Seguramente te estarás preguntando: ¿este chico está loco? ¿Y el calcio? ¿Qué excusa pondrá cuando se quiera ir de algún lado?, porque el «dejé la leche en el fuego» no va a ser creíble. Y así miles de interrogantes que rápidamente te refuto diciéndote que somos la única especie que toma leche de otro ser vivo, sin contar al pobre gatito al que siempre se la enchufamos. Al analizar que los terneros tienen cuatro estómagos y los seres humanos uno, resulta evidente por qué no es aconsejable.
Algo que me llamó la atención fue que la renina y la lactasa que son las enzimas encargadas de digerir la leche, desaparecen alrededor de los 3 años en casi todos los humanos. Entonces cuando ésta entra al organismo sin la intervención de dichas enzimas sucede que el estómago hace innumerables esfuerzos por digerirla y, aún así no lo consigue del todo, por lo que queda adherida a los intestinos como una especie de pasta difícil de remover. Con el tiempo fermenta y da lugar a inconvenientes como problemas de la tiroides, diabetes, alergias de todo tipo, exceso de flemas y mucosidades, dolores de estómago, excesivas flatulencias, afecciones cardíacas, ciertos tipos de cánceres, obesidad e incluso osteoporosis. Todo esto sin nombrar que hoy en día la leche, además de grasa y colesterol, cuenta con pesticidas, hormonas, dioxinas y antibióticos.
En Japón y china donde casi no consumen lácteos, poseen los más bajos niveles de osteoporosis, además solo el 0,12% tiene cáncer de mama y próstata, mientras que en los países occidentales más del 12%. Esto demuestra que se puede ingerir todo el calcio que se necesita comiendo brócoli, almendras, verduras de hoja verde oscura, amaranto, miel, avena, alfalfa, levadura de cerveza, coco, higos, porotos, semillas, cereales fortificados, entre otros.
El calcio es un mineral que da fortaleza a los huesos y es necesario para la coagulación de la sangre, el funcionamiento de los nervios y músculos. Es importante saber que su absorción se ve dificultada ante el consumo excesivo de café y alcohol, estrés, la falta de vitamina D y de ejercicios. Y el panorama se complica más para los carnívoros porque las proteínas de origen animal impiden que nuestro organismo asimile al 100% el calcio.
Por eso gente divina, mi consejo como siempre es consultar a un profesional gauchito en el caso que quieras reducir el consumo de lácteos, y digo reducir porque no es bueno ser extremista. Ahora sí, les regalo dos recetas súper fáciles de hacer, divertidas y con mucho calcio en sus ingredientes. Gracias por estar y a seguir eligiendo alimentarse con el corazón y no tanto con los ojos.
Pablito Martín
Tarta de la huerta
INGREDIENTES
Espinaca 500 gramos
Puerro 500 gramos
Tofu 100 gramos
Tomate cherry 50 gramos
Champiñón 150 gramos
Semillas de girasol 4 cucharadas
Tomillo 30 gramos
Perejil 50 gramos
Fécula de maíz 3 cucharadas
Agua fría 1 taza
Pimienta y sal Cantidad necesaria
Aceite de oliva Cantidad necesaria
Masa para tarta integral 1 disco
PROCEDIMIENTO
En una cacerola con una cucharada de aceite poné la espinaca, cocinala por 1 minuto revolviendo y retirala. Cortá todo el puerro en finas láminas, el tofu en cuadraditos, los tomates cherry por la mitad y los hongos en cuartos. Tostá las semillas y molelas. Mezclá la fécula en la taza con agua fría. Picá el perejil y el tomillo. En una cacerola sellá los hongos con un poquito de aceite, pimienta y sal. Cuando estén dorados por todos los lados retiralos, poné un poco de aceite y cociná a fuego fuerte el puerro por 15 minutos revolviendo para evitar que se queme. Agregá el tomillo, los hongos, la espinaca ligeramente cortada y rectificá sabores. Mientras terminas de cebarme un matecito, incorporá la taza con la fécula y revolvé hasta que espese (3 minutos). Apagá el fuego y añadí el tofu, los cherries, las semillas y el perejil. Girá la cacerola 392 ° y dejá que se enfríe el relleno. No sé si se enfriará más rápido pero tenía ganas de escribirlo. Prendé el horno en máximo. Extendé la masa integral en una fuente y cocinala 4 minutos. Sacala y llenala con el relleno. Cocinala por 10 minutos más o hasta que la masa esté hecha.
Gelatina de frutilla sobre colchón crocante
INGREDIENTES
Galletitas de vainillas 400 gramos
Margarina 0% 150 gramos
Frutillas 1 kg
Agar agar 25 gramos
Almendras 100 gramos
Semillas de sésamo 4 cucharadas
Azúcar orgánica 100 gramos
Agua ½ litro
PROCEDIMIENTO
Antes de comenzar poné música y relájate. Procesá las galletitas y margarina hasta obtener una masa arenosa. Cortale el cabito a las frutillas (reserva 4 para decorar) y licualas con el azúcar y el agua. Llevá el jugo a una cacerola y dejá que hierva. Con la ayuda de un batidor agregá el agar agar en forma de lluvia y batí por 1 minuto. Añadí las semillas, mezclá y listo. Poné la gelatina en moldes chiquitos dejando libre un dedo de grosor en la superficie. Llevalos a la heladera por 1 horas como mínimo. Picá o fileteá las almendras. Despegá la gelatina del borde de los moldes con un cuchillito. Por encima volcá la masa de las galletitas y con una cuchara apelmazalas un poco. Poné a hervir agua en una cacerola y apenas calentá cada moldecito para poder desmoldar el postre. Decorá con las almendras picadas y rodajas de frutillas.